sábado, 21 de diciembre de 2013

LA FORZA DEL DESTINO

La magia de Dora López
 Esta historia se la debo
a la gran artista malagueña
DORA LÓPEZ, por ser valiente y
porque ha hecho que me pierda
de nuevo por caminos
insospechados.
Mil gracias, Dora.

Gina Poule tenía solo un pelo de tonta y la mirada lánguida.



De pequeña coleccionaba el cristalino de los ojos de los besugos que se comía su padre y los guardaba como diamantes en una caja de música. Cuando se hizo mayor de edad, los escondió en el fondo del cajón de la mesilla de noche, al comprender que aquello no le traería suerte y que su verdadera fortuna estaba en aquel único cabello y en su forma de mirar.



Salió al mundo con sombrero y mucho rímel porque era valiente. Cuando nadie daba ya ni un duro por ella, conoció al hombre de su muerte en la pista de baile de un bar de copas. Se arrastró tras él hasta el borde del precipicio, pero antes de dejarse llevar por su destino, sacó el as que ocultaba en la manga.



Cerró los ojos para no verlo caer, dio media vuelta y se afeitó la cabeza.



Por si acaso.



Porque Gina Poule tenía solo un pelo de tonta.

1 comentario:

  1. Ayyyy vida!!!!..Te quedó GENIAL!!!!...Gracias a ti por hacer de mi una mujer valiente!!!!...

    ResponderEliminar

Me gusta que me dejes un comentario... o dos... o tres... o más!